Como ya dijimos en el apartado introductorio, el compresor MP3 analiza la señal de entrada y elimina aquella que puede desecharse. El algoritmo de compresión aplica un "modelo psicoacústico", es decir, un modelo basado en la forma en que nuestro oído percibe el sonido y como es interpretado por nuestro cerebro, aprovechando las imperfecciones de éste para eliminar la información irrelevante. Los aspectos más importantes de éste modelo psicoacústico son:
El sistema auditivo humano sólo es capaz de percibir sonidos cuya frecuencia esté comprendida entre 20Hz y 20KHz, aunque es más sensible en la zona intermedia de dicho espectro, entre 1KHz y 5KHz. Cualquier sonido con una frecuencia fuera de éste rango no puede ser percibido por lo que sería lógico eliminarlo.
Curva de audición.
El enmascaramiento es el fenómeno que se produce cuando un sonido imposibilita la percepción de otros que se producen al mismo tiempo. Existen dos tipos:
Cuando una componente a cierta frecuencia posee gran amplitud, las componentes de menor amplitud en frecuencias cercanas no pueden ser percibidas por el oído. El rango de frecuencias cercanas que se ve afectado por este fenómeno recibe el nombre de "banda crítica". Los experimentos realizados en este campo indican que la amplitud de esta banda crítica aumenta con la frecuencia.
Enmascaramiento Frecuencial.
Un sonido enmascarador enmascara también los sonidos débiles cercanos a él en el tiempo.
Enmascaramiento Temporal.
Éste es el aspecto más importante de la compresión MP3. El algoritmo de compresión debe ser capaz de determinar cuando se produce enmascaramiento. Cuando éste se produce se emplean menos bits para codificar las señales enmascaradas, es decir, aumenta el nivel de ruido en la señal, pero no será percibido al igual que en la secuencia original no se percibían los sonidos enmascarados.
Representación Tridimensional del Enmascaramiento.